Cambien ya de cuento por favor. Por TV vi al Primer Ministro Jorge del Castillo echarle la culpa a los extremistas de Moquegua. ¿Es que no hay otra manera de reaccionar al pedido del pueblo?
Meses atrás, se oyó de su boca que de la suspensión del Cusco como sede del Foro APEC, tuvieron la culpa los extremistas del Cusco. El año pasado, los extremistas de Alto Piura entorpecían los lindos negocios que hacía el gobierno con la minera Majaz, regalándole tierras sin previa consulta a dicha jurisdicción. Poco antes, los extremistas de Cajamarca reclamaban la contaminación del agua por Yanacocha.
Todos son unos ‘perros del hortelano’. Menos la Southern, Yanacocha, etc y todas estas mineras que mientras gobierno y pueblo se sacan las tripas, no se manifiestan por que no tienen ningún tipo de exigencia de parte de una legislación, ni de un ejecutivo que más parece un ‘perro faldero’- para continuar con el chiste de los canes.
La cuestión aquí es que de pronto todos son violentos, extremistas y rayados. Cuando la queja de la mala repartición de los impuestos tiene ya largo tiempo. Ahora, ¿no es legítimo pedir un aumento de impuesto con la multimillonaria sobre ganancia que tiene la Southern?
El primer error de profundidad fue, no atender a la petición cuando aún no fue protesta.
Y el segundo, que aquella movilización que iba a durar 2 días (48 h) se ha prolongado por las provocaciones del gobierno, que en lugar de mandar alguna autoridad representativa del gobierno central para dialogar de la manera más pacífica posible, mandó al general PNP Alberto Jordán y a todos esos policías y helicópteros que sólo lograron encrespar los ánimos del pueblo que no hizo más que defenderse ferozmente.
Y ya hemos visto por TV todos esas imágenes de Moquegua de persecuciones en helicóptero a lo Irak, y las bombas lacrimógenas por todo lado, obra y gracia de Alva Castro y sus estrategias policiales.
Es cierto, los sufren son los habitantes vecinos de Tacna, paisanos míos por cierto, de quienes comprendo la desazón por tener bloqueado el puente Montalvo, arteria que provee de muchos recursos alimentarios y de otras índoles a la ciudad sureña. No hay que permitir que esto siga así.
Ya se sabe la solución, ¿qué se espera para no encauzarla? Es simplemente aplicarle el impuesto legítimo a la minera abusiva, dialogar y lograr una mejor repartición del canon.
¿Por qué no se hace respetar nuestro estado? Sólo Alan y su modelo neo-regalón lo sabe.
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