miércoles, 7 de mayo de 2008

Opinión: ¿Podrá Bolivia cargar con esta Cruz?

Hace algunos meses, un amigo que venía de visitar Santa Cruz, Beni y Pando, me contó gratamente sorprendido acerca la cantidad de chicas de ojos claros y tez blanca que se había cruzado durante su viaje. Decepcionado, también me relató que la gente de estos lugares no quería saber nada de los indígenas quechuas y aymaras, ya que los consideraban inferiores, pobres y añadió que esto de la autonomía, lo venían pensando de hace mucho tiempo al no poder haber resuelto los problemas prehistóricos de la diferencia cultural y la discriminación mutua. “Ojalá no pase esto aquí”, acabó.
Por ello, al pasar esta semana, no me sorprendió el intento de separatismo de la oligarquía cruceña en el vecino país de Bolivia. Frases como “El departamento que le da de comer a los collas de occidente(…)”, se escucharon los últimos días con gran eco en Santa Cruz de la Sierra, según los enviados especiales de medios internacionales.

Leyendas preocupantes de la calaña de “haga patria, mate a un Colla”, o como “Morales, indio maldito”, se notaron en paredes y pintas en los distintos pasajes y calles. En la Av. Brasil de dicha localidad, según un reportero de El Universal (México), se podía leer: “a las armas valientes cruceños”, y se decía de boca en boca que habían llegado 300 militares venezolanos”. Claro que estos militares castrenses jamás se dejaron ver y mucho menos su armas. Por decirlo de algún modo, cualquier cosa valía para derrotar al enemigo, como casi en todo conflicto en nuestros países.

Pero al fin, ya está hecho. Según el resultado del primer referendo realizado, Santa Cruz ya ganó su ‘autonomía’ con un 85% por ciento del Sí, sin embargo, no fue a votar el 40 por ciento (faltan por consultar Pando, Beni y Tarija).

Esto sin duda, ha traído y traerá consecuencias lamentables que provocan la ruptura de la paz y del orden constitucional, así como se alterará la convivencia del pueblo boliviano.

Y todo esto, no digan que no, se produce por el jodido racismo. Alimentado claro por los intereses externos. Aumentado por que esta es una región abundante en petróleo y gas que se exporta al Brasil. Incrementado por las ganas de separarse de esa nación ‘Yunga’ de pobres. Muy bien exacerbado por las influencias de Washington. Y liderado por personajes como Branco Marinkovic, que de la boca para fuera lucha contra ‘la cubanización’ de Bolivia, cuando lo que en realidad luchan es aquel separatismo que tanto le conviene al vecino del norte, cuando la independencia y diferenciación de los países de Sudamérica, le quitaría excusas para intervenir militarmente.

Se avizora pues un ambiente de discordia y peligro de guerras internas, puesto son muchos los que prefieren a esa Bolivia progre y unificada. Amenazan momentos difíciles que tendrá que sostener el gobierno de Evo Morales. Por ahora, ellos se mantienen en pos del diálogo. Y para responder algo al deseo de mi amigo, ya está pasando algo similar aquí. Miren a Puno y su alcalde. La diferencia es la petición de federalismo para ellos es anticonstitucional.



PD:
Vean este video de YouTube, colgado en la Web Uterodemarita.com (cuya opinión no comparto enteramente). Sin embargo, nos muestra una pela de interesante descripción de la 'realidad boliche'. Que tal? Es la primera parte nada más. El resto en la página de los videos.

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