miércoles, 5 de noviembre de 2008

¿A pedradas aprendí?


Hola lectores. Tacna sufre el remezón político más violento de los últimos años. Acaso no se vio a tanta gente en las calles desde el fin de la dictadura del chino. Una bomba lacrimógena zamaqueó la materia gris de Gelmer Arpasi, ciudadano que protestaba, y le provocó la muerte.

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Las protestas surgieron de parte de la población tacneña cuando la ley de Canon que le daba a la región Tacna 496 millones 46 mil 300 nuevos soles y a Moquegua 160 millones 549 mil 100 nuevos soles, fue cambiada. Ahora Tacna recibe tan sólo 261 millones de nuevos soles, mientras que Moquegua recibirá 394 millones de soles.

Pero el ejecutivo, sigue permitiendo que las cosas se resuelvan entre ‘bombazos y guaracazos’.

Esto, para muchos tacneños, incluído el presidente regional Juvenal Ordóñez es un “irrespeto al principio de la equidad”. Mismos acontecimientos se produjeron en Moquegua cuando se luchó por la reciente ley, resultando una huelga indefinida que trajo consigo la paralización del puente Montalvo.

Acá la gente está acostumbrada a causar destrozos…me dice un patita con el que hablo por messenger. Por todo protestan estos indios…! (racista no más). Los cacerolazos suenan bajito y los vándalos se apoderan de la situación.

Por otro lado, los delincuentes han aprovechado esta ‘tierra de nadie’ para saquear y usar el caos para sus fechorías.

“Sectores de la población que no están de acuerdo con una salida pacífica, decidieron ayer formar un comité de lucha, desconociendo a las mismas autoridades. Ellos han iniciado las acciones de violencia y vandalismo", dijo José Mejía, presidente del Frente de Defensa de Tacna.

Las últimas informaciones datan 7 muertos. El local municipal del distrito de Ciudad Nueva es la última locación destrozada por las llamas, luego de la prefectura, la Sunat, RadioUno y un local del APRA. Las protestas en distritos jóvenes como Nueva Tacna y Cono Sur se exacerban y no hay cuando acabar.

El gobierno declaró estado de emergencia a toda la región Tacna y el ejército sale todos los días a partir de las 7 a ‘poner orden’.

Y Alan García dice que la crisis no llega al Perú, él vive en el país de las maravillas.

La vía del diálogo ha sido virtualmente vetada desde la muerte de Arpasi. Luego de él han fallecido más y la razón del violentismo tacneño rebasa las razones del canon, tal vez pueda tener un mensaje de venganza ante las fuerzas del “orden”, que entran en actitud provocadora.

Y el premier Simons tiene que partirse en mil para atender las distintas zonas de protesta en nuestro país, hablo de la Selva, Sicuani-Cusco, etc.

Pero a la Southern no se le aumenta el impuesto. No se le toca. No se le dice nada. La sobreganancia sigue produciéndose y el gobierno sigue permitiendo que las fuerzas armadas y los tacneños se revienten entre lacrimógenas y pedradas.

Se le pregunta a García si esa es la solución. Esta forma de gobernar para las mineras o las petroleras, está matando a pedradas al Perú.

¿Por qué tanta libertad a las empresas abusivas? Habría que tener las pelotas suficientes para decirles que se ajusten a una ley sensata que de una verdadera compensación económica y social al país del que se benefician.

Pero no lo harán jamás. Esta política económica está matando a pedradas al Perú.

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