La unidireccionalidad del mensaje fue brutal. No sólo por que el presidente habló, como se esperaba, sino porque habló sobre lo que se le antojó, se almorzó lo no quiso mostrar e hizo oídos sordos al interés de los peruanos, dejando fuera de la agenda temas de real importancia. Le dio una insana amplitud a la relatividad de los números.
Leyó, paporreteó y demostró con conchudez de búfalo que cada día crece en esa verdad a medias de que el Perú está creciendo. Admitió dos veces que ahora “le toca a los pobres”, lo que quiere decir que aceptó que en los dos años anteriores de gestión no hizo nada por ellos.
Además de bostezar en el discurso, he leído informaciones y columnas interesantes, así que trataré de extraer y comentar lo más importante. Ya que mucho se dijo, pero poco queda.
- ‘Hemos crecido el 9%’, dijo el mandatario, sin levantar entusiasmo alguno. Parece que el tropiezo de la bajada de palacio lo hizo asustar. Le atribuyó la culpa de la inflación al mercado externo por el alza de combustibles (cifras del BCR aluden a la inflación importada –el 12% y la interna, superior al 87%).
Y es que no aceptó que la causa interna de la subida de los alimentos de la canasta básica surgen también por la falta de producción. A - producción, + demanda y suben los precios. Y la falta de producción de alimentos viene de una política ausente de apoyo al agro. ¿Qué dijo del agro el presidente?
Dijo que hemos crecido en la producción y la exportación de arroz, espárrago, mango y otros productos costeros. De la sierra agrícola. Ni michi. Es decir, que la costa agrícola crece con alimentos de la mesa de los pituquetes como el espárrago. Pero, donde quedó la papa, el trigo, la quinua y los otros alimentos que el Perú produce pero que son desplazados a la faena primitiva. Para ellos, no se gastó saliva, simplemente porque no hay qué decir.
Es así como se ha hecho el firme objetivo de “mejorar la redistribución y lucha contra la pobreza extrema”? Ya nadie le cree a Alan García.
Cabe destacar también que la pobreza extrema también proviene de la falta de educación, analfabetismo y poco trabajo en las juventudes. ¿Qué se logró con la política educativa? Joder al SUTEP. Sí. ¿Pero que viene después? Tampoco se dijo. No todo es infraestructura, señor presidente, no todo son laptops. No hubo propuestas para trabajar con los docentes. Ni se mencionaron las universidades. La concesión sin control de las instituciones educativas al capital privado. Enajenación total del estado en ese sentido. Educación sólo para quien tiene dinero, jamás para el pobre que quiere progresar. Se perdió la cátedra libre y nadie clama por ello.
No habló de los reclamos por mejores salarios. Habló de regular el gasto fiscal. Que se le baje los salarios a los funcionarios públicos entonces – digo yo.
En cuanto a las leyes represivas y las licencias para matar contra los que protestan, forman sindicatos para evitar abusos de las grandes empresas, y luchan sol por sol su salario en jornadas de esclavos, nada se comentó.
Y es que desde que llegó al gobierno, García solo trabaja para las trasnacionales y capitales extranjeros haciendo sacudir en sus cajones a los apristas que forjaron los principios sociales del partido. Alan es más mentiroso que Pinocho, infringe lo que prometió en campaña.
Y mucho menos se palabreó de algo con gravedad colosal. De la Alianza Apro Fujimorista y su lucha anticorrupción que de eso sólo tiene el nombre. Lo picaresco del búfalo mayor, fue que mugió hipócritamente por una ausencia de fuerza "para salir de los aprovechadores y corruptos que no faltan, y que no debemos encubrir".
Mientras que 2 y 3 días atrás, su ministro favorito Alva Castro y otros fieles negociaron con Fuji-Rata, en su misma prisión, la elección del inacabable Velásquez Quesquén. Como dijo Julio Cotler “el APRA quedó descalificado. No podemos tolerar esto”. I just agree.
Y es que como para indignarse, reírse, molestarse, mofarse (como hacemos los peruanos de lo malo) y por último admirarse de la incoherencia y conchudez del mejor amigo de Raúl Vargas y Chicha Valenzuela, éste hizo nada menos que una invocación a una "reforma del espíritu y del alma".
¡Por Dios, de qué reforma espiritual estamos hablando! Si le acabas de vender tu alma al partido Alberto por el Futuro o Alianza por Fujimori o lo que sea. Si la Cuculiza se agarra de la mano con Meche Cabanillas en andandas lésbicas en palacio el mismo 28. ¡No jodas pues!
Más conchudo no podía ser. Las encuestas lo dicen, cada vez menos creen en Alan. Cada vez lo quieren menos. Además de joder al país, está desperdiciando su oportunidad de mejorar su imagen. Pasará a la historia como un vendepatria más, si continúa con sus políticas antinacionales.